Esta receta surgió un día que no había planeado cena, (cosa rara en mi), así que como me habían sobrado del día anterior contramuslos de pollo deshuesados y a mis hijos les gustan las lagrimitas de pollo que venden en Mercadona, pues se me ocurrió hacer una versión mejorada.
Es tan fácil que dudaba en subirla al blog, pero como en casa nos gustó mucho pues la comparto por si queréis probar ;-)
INGREDIENTES PARA 4 PERSONAS:
Contramuslos de pollo deshuesados. No recuerdo exactamente la cantidad, aproximadamente medio kilo.
Orégano.
Sal y pimienta.
Huevo.
Pan rallado con ajo y perejil.
Aceite de oliva.
PREPARACIÓN:
Cortamos los contramuslos en trozos, que no sean demasiado pequeños. Echamos sal, pimienta y orégano al gusto. Si tenemos tiempo, dejamos en el frigorífico un buen rato y si no, pues no pasa nada.
Calentamos aceite en una sartén amplia. Pasamos los trozos por huevo y pan rallado y los vamos friendo. No echéis la carne a la sartén hasta que el aceite esté bien caliente porque de lo contrario absorberá más aceite.
Cuando estén doraditos por fuera y hechos por dentro, colocamos en papel absorbente para eliminar el exceso de aceite y servimos.
Yo he acompañado con cous-cous.
¡Riquísimos!!
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