En esta ocasión, he contado con la ayuda de mi marido que ha picado las verduras mientras yo freía los calabacines. ¡Lo bien que viene un pinche de cocina de vez en cuando! ;-)
INGREDIENTES PARA 4 PERSONAS:
Cuatro calabacines grandes.
Medio kilo de tomates maduros.
Dos ajos.
Una cebolla.
Queso rallado.
Perejil.
Harina.
Sal y pimienta.
Aceite de oliva.
PREPARACIÓN:
Lavamos los calabacines y los cortamos a rodajas.
Salpimentamos las rodajas y las pasamos por harina. Las freímos en abundante aceite. Yo lo he hecho en freidora. Cuando estén listos los ponemos en una fuente apta para horno y reservamos.
Picamos muy finitos los ajos, cebollas y los tomates pelados
En una sartén calentamos aceite y ponemos a sofreír los ajos y la cebolla.
Cuando la cebolla empiece a ponerse transparente, añadimos los tomates.
Añadimos perejil picado y salpimentamos al gusto. Precalentamos el horno.
Dejamos hasta que el sofrito esté bien hecho. Y luego lo pasamos por la batidora y batimos muy bien. Ahora lo rociamos sobre los calabacines que tenemos en la fuente.
Espolvoreamos queso rallado al gusto.
Y metemos la fuente en el horno. Cuando el queso esté fundido y tenga un color doradito ya estarán listos nuestros calabacines.
¡Y a comer!
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